Fotografía libre de derechos de autor. Fuente: Wikimedia Commons.
Este artículo está dedicado a la figura de la actriz, productora, escritora y directora Angelina Jolie. Los acontecimientos, las vivencias y la posible problemática de su vida personal aquí no tendrán mucho sitio pues esas cosas solamente habrían de importarle a ella y a los suyos. Hay que destacar, sin embargo, la enorme labor de ayuda que ha desarrollado la actriz con su colaboración en trabajos humanitarios. La actriz es una de las mejores pagadas de Hollywood y ha querido aportar parte de su dinero a causas y proyectos totalmente encomiables.
Según los cánones de belleza de occidente, consideramos a Angelina Jolie como una de las mujeres más bellas del mundo. Pero en el mundo del cine no solamente la belleza y el atractivo son tenidos en cuenta, hay que saber interpretar, fingir emociones y hacerlo con propiedad y arreglo, sin desmesura ni tampoco tacañería. De otra forma, el séptimo arte estaría plagado de modelos o actores que sobreactúan. Jolie tiene una de esas caras de las que no necesitas ver una fotografía para tenerlas presente, eso es porque recordamos sus rasgos con bastante facilidad: grandes ojos azul grisáceos de mirada sensual, una gran simetría en su rostro, delgadez sin llegar a lo enfermizo y, sobre todo, sus labios carnosos que a veces pintan color sandia y otras, rojo fuerte. Desde pequeña y por naturaleza, Jolie goza de estos labios, es por esto que encuentro ridículos los comentarios que hablan de operaciones de estética; esta mujer nació así.
Desde niña, la actriz participaba en el mundo del cine de la mano de su padre, Jon Voight (al que recordamos por sus papeles en El campeón (1979) y Cowboy de medianoche (1969). El título de su primer largometraje fue: Lookin' to get out (1982); se trata de una comedia sin pretensiones que no tuvo mucho éxito. Si a los 7 años ya te mueves entre bastidores, no te puedes imaginar la soltura que tendrás para esto de resultar natural ante una cámara años después. Pero esto fue un comienzo que no tuvo continuidad delante de la cámara hasta 1993, cuando la actriz tenía ya 18 años y participó en la peor película de su filmografía: Cyborg 2, una suerte de secuela de Cyborg (1989), aquella con Jean-Claude Van Damme. Hay que destacar que los padrinos de Jolie son los excelentes actores: Jacqueline Bisset (Ricas y famosas, 1981) y Maximilian Schell (¿le recuerdas en la extraordinaria Vencedores o vencidos: Los juicios de Nuremberg, 1961?) En su adolescencia, Jolie sufrió fuertes depresiones y probó algunas drogas, llegando a autolesionarse con objetos cortantes (luego comentaría que aquello fue una especie de terapia para ella). La relación con su padre nunca fue buena. Todas estas tristes vivencias cargan a su mirada con un tono melancólico (aquel que ayuda siempre al buen actor, escritor o artista en general; por funesto que esto pueda parecer, es así y no de otra manera). El cómico guarda mucha tristeza en su interior.
Angelina Jolie ha destacado en un gran número de filmes o telefilmes: George Wallace (1997), un drama biográfico producido para la televisión que le valió un Globo de Oro a la mejor actriz secundaria. Gia (1999), una miniserie para la televisión basada en la vida de la modelo Gia Carangi, la que fue popular en la década de 1970; con esta serie Jolie ganaría otro Globo de Oro, esta vez a la mejor protagonista. Justo al año siguiente, Jolie ganaría un Óscar a la mejor actriz secundaria por Girl, interrupted (2000), que en España conocimos como Inocencia interrumpida; en esa compartió protagonismo con la inquietante y sensible actriz Winona Ryder (la interpretación de ambas actrices es de libro). Pero la actriz participa también en proyectos que solamente están destinados a la recaudación en taquilla, no tienen sustancia ni buena calidad artística (60 segundos, 2000; Siete días y una vida, 2002; Wanted, 2008, la que es un bodrio insufrible...) Lo bueno de esta historia de participar en estos engendros es que la actriz invierte luego ese dinero en proyectos humanitarios. Dos películas a rescatar de la filmografía de Jolie son: The bone collector (1999, que en España se tituló: El coleccionista de huesos; junto al buen actor Denzel Washington), y Original sin (2001, titulada en España: Pecado original; acompañada por el también destacado actor Antonio Banderas). Tal vez la crítica no supo apreciar la calidad en la trama y el suspense que tiene la primera, y la carga dramática y humana que tiene la segunda, las pasiones entre hombre y mujer están muy bien reflejadas en Original sin. Las últimas películas en que encontramos una magnífica interpretación de Jolie son: Changeling (2008, El intercambio en España; dirigida por el eficaz Clint Eastwood y basada en un hecho real) y Maleficent (2014, Maléfica en España; su mayor éxito comercial hasta la fecha. Es nada más y nada menos que la mala de La bella durmiente, 1959, en carne y hueso). Muchos llegaron a conocer a Jolie gracias a su interpretación de la muy popular heroína de videjuegos por aquellas fechas: Lara Croft en sus dos películas para el divertimento y la evasión: Lara Croft: Tomb Raider (2001) y Tomb Raider: The cradle of life (2003). Jolie se ha puesto detrás de la cámara con gran acierto en varias ocasiones: In the land of blood and honey (2011, En tierra de sangre y miel; con un guión escrito por ella) y, recientemente, Unbroken (2014, Invencible). Ambas totalmente recomendables.
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